lunes, 3 de junio de 2013

EL AYUNO DEL SEÑOR


EL AYUNO DEL SEÑOR

A los diez días de este mes séptimo será el día de expiación; tendréis santa convocación, y afligiréis vuestras almas, y ofreceréis ofrenda encendida a Jehová. Levítico 23:27 

 

La palabra Ayuno se define de la siguiente manera:

1. nesteia (νηστεία, G3521), ayuno (de ne, prefijo negativo, y esthio, comer). Se usa: (a) de la abstinencia voluntaria de comer

Pero resultara difícil entender el significado de esta práctica ni no consideramos los siguientes puntos:

¿todo el ayuno que se practica es espiritualmente bueno, solo por abstenerse de comer?, definitivamente que no todos los ayunos son espiritualmente aceptados por Dios y para nuestro beneficio, debemos de considerar que incluso muchas culturas paganas han practicado el ayuno, con disciplina y voluntad, pero esta práctica por si sola no nos acercará a Dios y nunca generará por si sola algún tipo de Justificación, expiación o santificación, por nuestro pecado, pues esto solo lo obtenemos por la Persona de Cristo, en su sacrificio en la Cruz y creyendo en Él, con toda nuestra alma, mente y corazón.

                Así mismo dentro de algunos sectores de la cristiandad, el ayuno ha sido mal entendido y se piensa que es la “bomba atómica de Dios” es decir que al ayunar, entonces Dios se ve obligado a concederte tus peticiones y resolver tus aflicciones como un último recurso que se ha guardado cuando todos han fallado, esta forma de pensar es una verdadera blasfemia en contra de los atributos de Dios y de su Gracia derramada en Cristo,

                Por lo tanto  “dejar de comer” no se utiliza para, crecer en la fe y tener mejor entendimiento de las escrituras, tampoco para ser más aceptado por Dios por mis obras, o para dejar de pecar y dominar mis pasiones, y mucho menos como práctica para lograr la salvación, pues la escritura es muy clara en indicar que esto es un regalo de Cristo:

1Corintios 1:30  Más por él estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, justificación, santificación y redención;

Además recordemos lo que la escritura dice acerca de algunas “prácticas religiosas” mal entendidas y sacados de su contexto. Las cuales no te servirán para librarte de tu naturaleza pecaminosa la cual solo puede salvarte la fe en Cristo Jesús.

Colosenses 2:23  Tales cosas tienen a la verdad cierta reputación de sabiduría en culto voluntario, en humildad y en duro trato del cuerpo; pero no tienen valor alguno contra los apetitos de la carne.

Romanos 1:16-17  Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.   Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá.

¿Entonces qué significa el verdadero ayuno de la biblia el cual incluso Jesús Validó?

Para responder esta pregunta primero, debemos de entender que él ayuno del Señor es una práctica del pueblo de Dios, así que para entender el verdadero significado hay que salir de la condición que habla el siguiente versículo.

Efesios 2:12  En aquel tiempo estabais sin Cristo, alejados de la ciudadanía de Israel y ajenos a los pactos de la promesa, sin esperanza y sin Dios en el mundo.

Para saber del verdadero ayuno que agrada a Dios, debo de conocer al único y verdadero Dios, Jesucristo.

1.- que enseña Dios en su palabra acerca de la condición del hombre:

·         Reconocer mi condición de muerte espiritual por medio de mi pecado y la muerte segunda que se aplicara en el justo juicio de Dios y representa pasar la eternidad en el lago de fuego que es la muerte segunda. Apocalipsis 21:8  Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda.

 

Romanos 5:12  Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.

Romanos 3:23  por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios,

 

·         Reconocer mi corazón de maldad y mi naturaleza pecadora que atenta contra la santidad de Dios merece maldición por mi desobediencia.

 

Jeremias_17:9  Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?

Romanos 8:7-8  Por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios; porque no se sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden;   y los que viven según la carne no pueden agradar a Dios.

Deuteronomio 27:26  Maldito el que no confirmare las palabras de esta ley para hacerlas. Y dirá todo el pueblo: Amén.

Romanos 3:19  Pero sabemos que todo lo que la ley dice, lo dice a los que están bajo la ley, para que toda boca se cierre y todo el mundo quede bajo el juicio de Dios;

Proverbios 1:24-26  Por cuanto llamé, y no quisisteis oír, Extendí mi mano, y no hubo quien atendiese,   Sino que desechasteis todo consejo mío Y mi reprensión no quisisteis,  También yo me reiré en vuestra calamidad, Y me burlaré cuando os viniere lo que teméis;

 

2.- que me dice la escritura para solucionar este problema del hombre:

·         Primero necesito arrepentirme y creer en toda la palabra de Dios, acerca de Jesucristo.

1 Juan 4:10  En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados.

Marcos 1:14-15  Después que Juan fue encarcelado, Jesús vino a Galilea predicando el evangelio del reino de Dios, diciendo: El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio.

Es importante  reconocer mi condición pecadora. Isaías 55:7  Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar.

·         Tengo que morir a mis pensamientos pasados, mis deleites pecaminosos y mis obras de maldad, debo de acudir a Cristo, desnudo de capacidades, vacio de fuerzas y solo mirar a él,

Isaías 55:1  A todos los sedientos: Venid a las aguas; y los que no tienen dinero, venid, comprad y comed. Venid, comprad sin dinero y sin precio, vino y leche.

Mat 11:28- 30  Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.   Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas;  porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.

·         Tengo que apropiarme de su muerte, sepultura y resurrección, pues Cristo murió en mi lugar, y al resucitar el  permite que su vida sin pecado me cuente a mí, para ser salvo de la ira de Dios.

Gálatas 2:20  Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.

Romanos 4:25  el cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra justificación.

2 Corintios 5:21  Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él.

·         Ahora puedo nacer de nuevo y obtener un nuevo corazón

Tito 3:4-7  Pero cuando se manifestó la bondad de Dios nuestro Salvador, y su amor para con los hombres, nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo,  el cual derramó en nosotros abundantemente por Jesucristo nuestro Salvador,  para que justificados por su gracia, viniésemos a ser herederos conforme a la esperanza de la vida eterna.

Eze 36:25-27  Esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpiados de todas vuestras inmundicias; y de todos vuestros ídolos os limpiaré. Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne.  Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos, y los pongáis por obra.

 

Ahora si entonces hablemos acerca del ayuno bíblico.

Primeramente es importante reconocer que el pecado es abominación para Dios, es por ello que es deseo del Señor todopoderoso que su pueblo reconozca su sentir y asimismo se aflija, es decir entristezca, a causa del pecado y de la condición de muerte de muchos de sus hermanos y amigos.

Levítico 23:27  A los diez días de este mes séptimo será el día de expiación; tendréis santa convocación, y afligiréis vuestras almas, y ofreceréis ofrenda encendida a Jehová.

Regularmente cuando existe una consternación y gran tristeza por haber ofendido a nuestro Dios y estar lejos de su santidad, entonces lo primero que hacemos es “dejar de comer”, ahora  dejar de comer es el resultado de un espíritu triste, de un alma afligida, es por ello que el ayuno bíblico es el resultado de estas dos cosas que nacen de la conciencia de pecar y ofender a Dios

Conciencia de haber ofendido a Dios a causa del pecado

Resultado: tristeza y aflicción de espíritu.

Resultado: dejar de comer “Ayuno”

Sal 35:13  Pero yo, cuando ellos enfermaron, me vestí de cilicio; Afligí con ayuno mi alma, Y mi oración se volvía a mi seno.

Sal 69:10  Lloré afligiendo con ayuno mi alma, Y esto me ha sido por afrenta.

Isa 58:5  ¿Es tal el ayuno que yo escogí, que de día aflija el hombre su alma, que incline su cabeza como junco, y haga cama de cilicio y de ceniza? ¿Llamaréis esto ayuno, y día agradable a Jehová?

Ester 4:3  Y en cada provincia y lugar donde el mandamiento del rey y su decreto llegaba, tenían los judíos gran luto, ayuno, lloro y lamentación; cilicio y ceniza era la cama de muchos.

 

Ahora bien, el afligir el alma con ayuno no es suficiente, tal acción de reconocimiento del pecado solo puede ser acompañada de un clamor al Dios verdadero, conociendo su grande misericordia y amor para con su pueblo.

Conciencia de haber ofendido a Dios a causa del pecado

Resultado: tristeza y aflicción de espíritu.

Resultado: dejar de comer “Ayuno”

Reacción: Oración ferviente.

 

Jeremías 33:3  Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces.

Juan 16:24  Hasta ahora nada habéis pedido en mi nombre; pedid, y recibiréis, para que vuestro gozo sea cumplido.

 

Definiremos la práctica del ayuno como sigue:

El ayuno es la práctica que resulta de la aflicción extrema del alma a causa de reconocer la condición pecadora del hombre y en la cual se clama con todo el ser, alma mente y corazón por la misericordia de Dios para salvación de las almas. Y siempre va acompañada de una vida piadosa y frutos dignos de arrepentimiento, en quien lo practica.

 

2 Corintios 7:10  Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación, de que no hay que arrepentirse; pero la tristeza del mundo produce muerte.

 

Por lo tanto el ayuno no solo es una “práctica religiosa” sino una práctica de un corazón regenerado el cual se agrada en la vida piadosa y en la santidad buscando agradar al Señor por medio de la fe en Cristo Jesús.

El Señor reprendió a los judíos que hacían ayuno alejados de todo entendimiento e incluso hacían “ayunos falsos” alejados de toda verdad  y guianza del Espíritu.

Isaías 58:1-14  Clama a voz en cuello, no te detengas; alza tu voz como trompeta, y anuncia a mi pueblo su rebelión, y a la casa de Jacob su pecado. Que me buscan cada día, y quieren saber mis caminos, como gente que hubiese hecho justicia, y que no hubiese dejado la ley de su Dios; me piden justos juicios, y quieren acercarse a Dios. ¿Por qué, dicen, ayunamos, y no hiciste caso; humillamos nuestras almas, y no te diste por entendido? He aquí que en el día de vuestro ayuno buscáis vuestro propio gusto, y oprimís a todos vuestros trabajadores. He aquí que para contiendas y debates ayunáis y para herir con el puño inicuamente; no ayunéis como hoy, para que vuestra voz sea oída en lo alto.  ¿Es tal el ayuno que yo escogí, que de día aflija el hombre su alma, que incline su cabeza como junco, y haga cama de cilicio y de ceniza? ¿Llamaréis esto ayuno, y día agradable a Jehová? ¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas de opresión, y dejar ir libres a los quebrantados, y que rompáis todo yugo?  ¿No es que partas tu pan con el hambriento, y a los pobres errantes albergues en casa; que cuando veas al desnudo, lo cubras, y no te escondas de tu hermano?  Entonces nacerá tu luz como el alba, y tu salvación se dejará ver pronto; e irá tu justicia delante de ti, y la gloria de Jehová será tu retaguardia.  Entonces invocarás, y te oirá Jehová; clamarás, y dirá él: Heme aquí. Si quitares de en medio de ti el yugo, el dedo amenazador, y el hablar vanidad;  y si dieres tu pan al hambriento, y saciares al alma afligida, en las tinieblas nacerá tu luz, y tu oscuridad será como el mediodía.  Jehová te pastoreará siempre, y en las sequías saciará tu alma, y dará vigor a tus huesos; y serás como huerto de riego, y como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan. Y los tuyos edificarán las ruinas antiguas; los cimientos de generación y generación levantarás, y serás llamado reparador de portillos, restaurador de calzadas para habitar.  Si retrajeres del día de reposo tu pie, de hacer tu voluntad en mi día santo, y lo llamares delicia, santo, glorioso de Jehová; y lo venerares, no andando en tus propios caminos, ni buscando tu voluntad, ni hablando tus propias palabras, entonces te deleitarás en Jehová; y yo te haré subir sobre las alturas de la tierra, y te daré a comer la heredad de Jacob tu padre; porque la boca de Jehová lo ha hablado.

 

La biblia nos enseña que lo importante es hacer obras dignas de arrepentimiento, obras que agraden a Dios, de que sirve afligirse y llorar por el pecado, dejar de comer si nuestras obras ofenden la santidad de Dios, esto es contradictorio y falso, incluso pecado delante del Señor,, es por ello que tenemos que ser congruentes y mostrar nuestra fe por las obras, y que todos los días vivamos una vida piadosa y santa delante de nuestro Dios misericordioso.

Santiago 2:14-20  Hermanos míos, ¿de qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene obras? ¿Podrá la fe salvarle? 15  Y si un hermano o una hermana están desnudos, y tienen necesidad del mantenimiento de cada día, 16  y alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y saciaos, pero no les dais las cosas que son necesarias para el cuerpo, ¿de qué aprovecha? 17  Así también la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma. 18  Pero alguno dirá: Tú tienes fe, y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin tus obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras. 19  Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y tiemblan. 20  ¿Mas quieres saber, hombre vano, que la fe sin obras es muerta?

Jesús, confirmo esta palabra, puesto que el verdadero ayuno seria guiado por el Espíritu de Dios a través del nuevo nacimiento, entonces sus discípulos aprenderían esta práctica, es decir, un corazón que no ha sido regenerado no entenderá el valor del ayuno y la oración, pero alguien que ha sido salvado por la gracia redentora de Cristo, entonces entenderá la compasión y el dolor por los perdidos tal como el Padre lo desea.

Lucas 5:33-38  Entonces ellos le dijeron: ¿Por qué los discípulos de Juan ayunan muchas veces y hacen oraciones, y asimismo los de los fariseos, pero los tuyos comen y beben? 34  El les dijo: ¿Podéis acaso hacer que los que están de bodas ayunen, entre tanto que el esposo está con ellos? 35  Más vendrán días cuando el esposo les será quitado; entonces, en aquellos días ayunarán. 36  Les dijo también una parábola: Nadie corta un pedazo de un vestido nuevo y lo pone en un vestido viejo; pues si lo hace, no solamente rompe el nuevo, sino que el remiendo sacado de él no armoniza con el viejo. 37  Y nadie echa vino nuevo en odres viejos; de otra manera, el vino nuevo romperá los odres y se derramará, y los odres se perderán. 5:38  Mas el vino nuevo en odres nuevos se ha de echar; y lo uno y lo otro se conservan.

En ese momento los discípulos de Jesús tenían al consolador, al Rey de reyes y Señor de señores, su gozo era grande, no había tristeza pues él es la resurrección y la vida, por ello no ayunaban, pues no había aflicción y tristeza, pero  a él ascender al Padre, entonces vendría nuevamente el clamor por los pecadores, y ahora necesitarían ayunar y orar, como Jesús mismo lo hizo, hasta que el regrese por segunda vez y entonces tendremos nuevamente al Esposo y ya no habrá más tristeza ni llanto, sino gozo verdadero en su presencia por la eternidad.

Mat 4:1-11  Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el diablo. 2  Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre. 3  Y vino a él el tentador, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan. 4  El respondió y dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios. 5  Entonces el diablo le llevó a la santa ciudad, y le puso sobre el pináculo del templo, 6  y le dijo: Si eres Hijo de Dios, échate abajo; porque escrito está: A sus ángeles mandará acerca de ti, y, En sus manos te sostendrán, Para que no tropieces con tu pie en piedra. 7  Jesús le dijo: Escrito está también: No tentarás al Señor tu Dios. 8  Otra vez le llevó el diablo a un monte muy alto, y le mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos, 9  y le dijo: Todo esto te daré, si postrado me adorares. 10  Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás. 11  El diablo entonces le dejó; y he aquí vinieron ángeles y le servían.

Al partir Jesucristo al Padre los apóstoles comenzaron su vida de ayuno y oración según las instrucciones del Señor.

Lucas 5:35  Más vendrán días cuando el esposo les será quitado; entonces, en aquellos días ayunarán

Mat 6:16-18  Cuando ayunéis, no seáis austeros, como los hipócritas; porque ellos demudan sus rostros para mostrar a los hombres que ayunan; de cierto os digo que ya tienen su recompensa.17  Pero tú, cuando ayunes, unge tu cabeza y lava tu rostro, 18  para no mostrar a los hombres que ayunas, sino a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.

Hechos 13:2-3  Ministrando éstos al Señor, y ayunando, dijo el Espíritu Santo: Apartadme a Bernabé y a Saulo para la obra a que los he llamado. 3  Entonces, habiendo ayunado y orado, les impusieron las manos y los despidieron.

Hecho 14:23  Y constituyeron ancianos en cada iglesia, y habiendo orado con ayunos, los encomendaron al Señor en quien habían creído.

Podemos observar que siempre que los apóstoles ayunaban, Dios mostraba decisiones importantes con respecto al avance de su obra y la gran comisión, por ello la oración y el ayuno siempre es motivado por una gran compasión por las almas.

Los Hijos de Dios somos llamados a tener compasión por las almas.

Mat 9:36  Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor.

A presentar ruegos y suplicas por todos los hombres para que lleguen al conocimiento de la verdad

Levítico 23:27A los diez días de este mes séptimo será el día de expiación; tendréis santa convocación, y afligiréis vuestras almas, y ofreceréis ofrenda encendida a Jehová. 

Siempre con una actitud santa, dando testimonio de la fe en nuestros corazones, orando y ayunando afligidos por el pecado y haciendo buenas obras las cuales Dios preparo de antemano para que anduviéramos en ellas.

Isaías 58:6-8  ¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas de opresión, y dejar ir libres a los quebrantados, y que rompáis todo yugo? 7  ¿No es que partas tu pan con el hambriento, y a los pobres errantes albergues en casa; que cuando veas al desnudo, lo cubras, y no te escondas de tu hermano? 8  Entonces nacerá tu luz como el alba, y tu salvación se dejará ver pronto; e irá tu justicia delante de ti, y la gloria de Jehová será tu retaguardia.

Este fue siempre el propósito de Jesucristo al venir a la tierra tomando forma de siervo hecho semejante a los hombres,

Isa 61:-1-2  El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel; 2  a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados;

Ahora los que somos redimimos por él tenemos el compromiso, por amor a su nombre de continuar el trabajo que comenzó Jesucristo, como sus mayordomos fieles.

Juan 14:12  De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aun mayores hará, porque yo voy al Padre.

 

Por tanto concluimos que el ayuno del Señor no solo es una “práctica religiosa” sino implica todo un entendimiento, en el nuevo nacimiento, y la obra redentora de Cristo en la Cruz del calvario, la cual nos habilita para extender su Reino y hacer su voluntad hasta que él vuelva, y aun esto es posible gracias a su Espíritu Santo el cual fue derramado abundantemente  por Jesucristo.

¿Cuánto tiempo tengo que ayunar?, esta respuesta dependerá de tu relación con Dios, en las escrituras podemos encontrar varios ejemplos de duraciones y características de un ayuno,

¿Puedo estar sin comer, y continuar en mis labores diarias?, el ayuno va relacionado a la oración y las obras piadosas guiadas por el Espíritu Santo, siempre estará de la mano este propósito según lo hemos explicado con anterioridad, recordemos que Dios no quiere sacrificios sino obediencia, lo más recomendable es buscar un día que nos permita esto, acomodando mis horarios, ahora sabemos que la consternación por el pecado no tiene horario y siempre es necesario estar listo para toda buena obra.

¿Solo ayunando puedo manifestar mi consternación y tristeza por el pecado?, la compasión por las almas en un nacido de nuevo, siempre está presente, en todo oración, ruego, suplica y acción de gracias al Señor, y en la soberanía de Dios, también tenemos gozo en la salvación y en las maravillas del Señor. Por tanto.

Colosenses 3:17  Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él.

¿Requiere un esfuerzo y disciplina de mi parte? Recordemos que Dios pone en nosotros el querer como el hacer por su buena voluntad, y la escritura nos enseña:

Romanos 6:19  Hablo como humano, por vuestra humana debilidad; que así como para iniquidad presentasteis vuestros miembros para servir a la inmundicia y a la iniquidad, así ahora para santificación presentad vuestros miembros para servir a la justicia.

Romanos 12:1  Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.

Recordemos que aunque sea una disciplina y un esfuerzo que hacemos la gloria siempre debe ser para Cristo.

2 Corintios 10:17  Más el que se gloría, gloríese en el Señor;

 

Iglesia bíblica reformada, Venciendo al Mundo,1 Juan 5:4-5.

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